Page 81 - Demo

80el profeta muhammad en la bibliaSi Brahma y Osiris, o Júpiter y Vesta fueran asociados a Dios, lo consideraríamos simplemente una creencia pagana. Ahora bien, cuando vemos a Jesús (que la paz sea con él), el profeta de Nazaret, y a uno de los millones de espíritus santos al servicio del Eterno, elevados a una dignidad igual a la de Dios, no podemos hallar para aquellos que creen en eso otro calificativo que el que siempre se han visto obligados a usar los musulmanes, a saber, el epíteto ghawun (‘extraviados’). Dado que este terrible cuerno que profiere grandes palabras y blasfemias contra Dios es un rey, como se lo revela el ángel a Daniel, y dado que este rey era el undécimo de los césares que reinaron en Roma y persiguieron al pueblo de Dios, no puede ser30 sino el propio Constantino, porque fue su edicto el que proclamó la creencia en la trinidad de las personas en la divinidad. Este credo tiene en el Antiguo Testamento un documento vivo que lo condena como blasfemia y que aborrecen tanto los judíos como los musulmanes. Si no es Constantino, la pregunta que surge es: ¿De quién se trata entonces? Si ya ha venido y desaparecido, y no ha de aparecer ningún impostor ni el Anticristo, será difícil de reconocer e identificar. Si no aceptamos que el cuerno en cuestión ya ha venido, entonces ¿cómo hemos de interpretar las cuatro bestias, la primera de las cuales es ciertamente el Imperio caldeo; la segunda, el aqueménida persa, etc.? Si la cuarta bestia no representa al Imperio romano, ¿cómo podemos interpretar la tercera, con cuatro cabezas, como el Imperio de Alejandro, dividido en cuatro reinos tras su muerte? ¿Hubo alguna potencia que sucediera al Imperio griego antes que el Imperio romano y que contara diez persecuciones a los creyentes en Dios? El sofisma y la ilusión son inútiles. El «pequeño cuerno» es, indudablemente, Constan30 «Los judíos dicen: “Uzayr es el hijo de Dios”. Y los cristianos dicen: “El Ungido es el hijo de Dios”. Eso es lo que dicen de palabra. Remedan lo que ya antes habían dicho los infieles. ¡Que Dios les maldiga! ¡Cómo pueden ser tan desviados!» (Corán 9:30). [Nota de los editores]..