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                                    249el «hijo del hombre» apocalíptico es el profeta muhammadotros pocos judíos, incluidos los apóstoles, que, en su mayoría, murieron por su causa poco después. Muy probablemente, lo que dijo Jesús fue: «El Hijo del Hombre vendrá para buscar y recuperar lo perdido», pues solamente con Muhammad (al que Allah bendiga y dé paz) los creyentes judíos y árabes y todo creyente verdadero encontraron todo lo que estaba irremediablemente perdido y destruido: Jerusalén y La Meca, las tierras prometidas; muchas verdades acerca de la verdadera religión; el poder y el Reino de Dios; y la paz y la bendición que el islam confiere en esta vida y en la otra.No dedicaremos más espacio para otras citas de los numerosos pasajes en los que el «Hijo del Hombre» aparece como sujeto, objeto o predicado de la frase. Pero tendremos suficiente con una cita más: «así también el Hijo del Hombre padecerá a manos de ellos» (Mateo 16:21, 17:12, etc.). Y todos los pasajes en los que se le hace sujeto de la pasión y la muerte. Esas expresiones son puestas en boca de Jesús (que la paz sea con él) por algún escritor falsario no hebreo con el objeto de adulterar la verdad acerca del «Hijo del Hombre», tal y como es entendida y creída por los judíos, y, de este modo, hacerles creer que Jesús de Nazaret era el salvador apocalíptico triunfante, que solamente aparecería el día del Juicio Final. Fue una política y una propaganda maliciosa de disuasión y, luego, de persuasión orquestada a propósito por los judíos. No obstante, el fraude fue descubierto como también los judíos cristianos pertenecientes a la iglesia que atribuía un origen divino a esos evangelios. Y es que nada puede ser más repugnante para las aspiraciones nacionales y sentimientos religiosos judíos que presentarles el esperado Mesías, el gran Bar Nasha, en la persona de Jesús (que la paz sea con él), a quien los principales sacerdotes y los ancianos condenaron a ser crucificado por seductor. Queda patente, pues, que Jesús nunca se apropió del título del «Hijo del Hombre», sino que se lo reservó solamente a Muhammad (al que Allah bendiga y dé paz). He aquí unos cuantos argumentos:
                                
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